Si bien el arte contemporáneo tiene muchas variables, hay ciertos patrones que pueden identificarse en la mayoría de las obras. El minimalismo es una de esas tendencias que se han vuelto comunes en el arte, dado que también hace parte del estilo actual.
Algunos cuadros contemporáneos han seguido esta tendencia, siendo parte de un arte que, aunque puede considerarse sencillo, es por completo elegante.
¿Qué es el arte contemporáneo?
Para comprender a qué nos referimos con la elegancia del arte contemporáneo minimalista, lo primero es entender qué se considera arte contemporáneo México.
Este término se utiliza para definir al arte de nuestro tiempo, es decir, desde mediados del siglo XX hasta la actualidad. El arte es siempre un reflejo de la sociedad actual, por lo que la palabra «contemporáneo» engloba una amplia gama de prácticas dentro de las artes que se mantienen a la vanguardia de la sociedad.
Aunque bien, cuando se habla de este concepto del arte contemporáneo mexicano, hace referencia de manera principal a las artes plásticas, dado que en terrenos como la literatura, el cine y la música, la definición de lo contemporáneo o popular puede variar un poco.
¿Qué es el minimalismo?
El minimalismo quiere decir reducir todo a lo esencial, quitar por completo elementos sobrantes. Todo basado siempre en la premisa de que «menos es más» que se atribuye al arquitecto moderno Mies Van der Rohe.
Surgió en Estados Unidos en la década de los 60, en parte como consecuencia de la Segunda Guerra Mundial y la austeridad subsecuente de uno de los conflictos bélicos más grandes del siglo pasado. En esta época se dio su desarrollo pleno como movimiento artístico.
Lo curioso del minimalismo es que, mediante la reducción de la labor del artista, se da un aumento en la labor del espectador. Esto debido a que quien mira la obra es quien puede otorgarle mayor significado desde su propia percepción.
Algunas características de este movimiento son:
Abstracción
Quien crea u observa una obra de arte minimalista deberá tomar las características generales de lo que ve o imagina y reducirlas de la mejor manera. Es decir, se aíslan las propiedades de un objeto y se piensa que es en función de lo que se observa, ignorando otras propiedades.
Concentración
Tanto para el artista como para quien observa la obra final, el arte minimalista exige un gran nivel de concentración al interactuar con los cuadros contemporáneos. De este modo, la persona podrá encontrarse consigo y sus pensamientos a través de la obra.
Economía del lenguaje y medios
Como mencionamos, el minimalismo es una tendencia que surgió de la austeridad, pero los artistas del momento convirtieron la falta de recursos en una tendencia que hasta hoy se mantiene y es precisamente la gracia de este estilo.
Por otra parte, no es necesario dar demasiadas explicaciones sobre este tipo de obras, son lo que son, y precisamente esto brinda la posibilidad de que las personas se encuentren con el arte en la manera que sus propios pensamientos y deseos se lo indiquen.
Reducción y síntesis
Sin necesidad de atiborrar las obras, expresar lo que se quiere con lo mínimo y tratar de transmitir algo. Para muchas personas esto puede resultar incomprensible a primera vista, pero esa es la gracia, la búsqueda de interpretación.
Por ejemplo: si ven una línea, sí, es una línea, pero ¿qué quiere decir ese trazo? ¿Cuál es la intencionalidad? ¿Por qué una línea y no otro elemento distinto? Todo está dado a la interpretación de quien observa y eso es lo bello.
Un buen ejemplo
En este momento en Aura Galerías contamos con una exposición muy llamativa y bella en su sencillez, se trata de la obra del artista norteamericano Hunt Slonem con su art wall de conejos, aves y mariposas.
Aunque su obra es considerada neoexpresionista, cabe resaltar que muchas veces el arte no se puede encasillar dentro de una sola categoría, porque la mayoría de las obras suelen ser muy versátiles, como lo es en este caso.
Sus vibrantes cuadros de conejos con trazo simple sobre colores vivos pueden transmitir en los espectadores diferentes emociones.
Imaginen un conejo con todas sus características, pelaje, patas, orejas, ojos, nariz, bigote; pues bien, Slonem toma la figura de este animal y la reduce a un trazo que parece, incluso, hecho por completo de una sola línea. No es necesario, en este caso, una gran cantidad de información para que el espectador comprenda que se trata del animal en cuestión, eso es lo bello de este tipo de arte.
Aprovechen para conocer esta obra y tengan la posibilidad de conectarse con la belleza de estos cuadros contemporáneos con los que en Aura Galerías tenemos la fortuna de contar. Ingresen a nuestro sitio web auragalerias.com y registren sus datos para suscribirse a nuestro boletín informativo y mantenerse al tanto sobre nuestras obras y exposiciones.